Qué son y cómo invertir en Fibras
El 2019 fue el año de las Fibras en relación al desempeño general en bolsa.
Los fideicomisos de infraestructura en bienes raíces (Fibras) tienen relativamente poco tiempo en nuestro país y están por cumplir una década el siguiente año.
Haciendo un breve repaso, existen fibras privadas y fibras públicas; estas últimas son las que cotizan en bolsa y permiten que pequeños y medianos inversionistas puedan invertir en grandes proyectos de bienes raíces, sin desembolsar grandes cantidades de dinero.
Desde su inicio, el menú ha ido en crecimiento de manera muy interesante y las Fibras se distinguen por especializarse en ciertos sectores, tales como uso mixto (oficinas, comercio y departamentos), hoteleras, de centros comerciales y de industria, por mencionar algunos ejemplos.
Estos instrumentos ofrecen un rendimiento total proveniente de dos partidas: la ganancia de capital (incremento en precios de los títulos que conforman el fideicomiso) y la distribución de efectivo (proveniente del pago de las rentas), lo que hace que sean vehículos muy atractivos para el inversionista de mediano y largo plazo.
Dentro de los beneficios de invertir en Fibras se encuentra su liquidez inmediata y los bajos montos de inversión inicial.
Las fibras son administradas por un equipo gerencial especializado y ofrecen un flujo de efectivo estable, ya que la mayoría de las fibras públicas registran una ocupación mayor al 90%, por lo que el inversionista se limita a evaluar cada fideicomiso y conocer el mercado.
Otra de sus ventajas es su liquidez, ya que siempre será más fácil vender/comprar estos títulos en el mercado bursátil que buscar y conseguir un comprador/vendedor de un bien raíz tangible. Obviamente, esta ventaja viene de la mano con los movimientos en precios donde el inversionista tendrá que observar fluctuaciones en el precio de los títulos.
Para poder invertir en Fibras solo es necesario abrir una cuenta de inversión con alguna casa de bolsa (existen opciones de apertura desde un monto inicial de 1,000 pesos) y comprar títulos de las opciones disponibles que, en promedio, cotizan por debajo de los 100 pesos.
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